Conducir requiere práctica, pero las curvas aún se resisten a muchos conductores, especialmente si hablamos de carreteras que no son urbanas o que son estrechas. En SEAT saben que esto supone todo un reto para los pilotos, por eso recuerdan la importancia tener adherencia, estabilidad y las máximas prestaciones en tu vehículo para garantizar seguridad en todo momento.
Uno de los primeros consejos que el equipo de SEAT da es que conozcas el terreno o al menos estés atento a la carretera para conocer cuanto antes que vas a cruzar una curva. Estate muy atento a la señalización, reduciendo la marcha justo antes del giro: “Cuando las ruedas del coche están todavía rectas es cuando contamos con mayor estabilidad”, asegura Ángel Suárez, Gerente de Física del Vehículo en SEAT S.A.
Es imprescindible ver y ser vistos, adaptándonos a las situaciones del momento de la forma más rápida posible. Los SEAT incorporan faros delanteros 100% LED, que dan más visibilidad con menos consumo. Siempre que vayas a trazar una curva recuerda ceñirte a los espacios del carril, dibujando una línea lo más amplia posible, para tener mayor visibilidad y margen. Además, los giros siempre hay que hacerlos de forma progresiva, manteniendo la velocidad constante y evitando movimientos bruscos.
Una vez que hayas girado por completo y las ruedas estén rectas, podrás acelerar para salir con más estabilidad y preparase para el siguiente giro. Ruedas del 18, como las del SEAT Ibiza FR, te ayudan a reducir los ángulos de deslizamiento de los neumáticos.
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